80 Años y Enamorado de Nuevo

Llegué el jueves 29 de marzo a mi querida Argentina y me esperaban docenas de abrazos y besos.  Nadie sabe expresar el amor como mis muchos amigos argentinos.  La foto es de tres de nuestras “nietas”.  Ayudamos a sus padres abrir una iglesia en el sur de la Patagonia en la década de los noventa. Levantamos una carpa, hicimos la primera campaña evangelística, y les ayudamos comprar una propiedad para edificar.  Las tres chicas, mucho más niñas en ese entonces, juntamente con su hermanito nos adoptaron a Frances y a mi como sus “abuelos.”  Ahora las chicas están estudiando en la zona de Buenos Aires y al verme vinieron corriendo a inundarme con su amor.  Hubo muchos otros, varones y mujeres, jóvenes, adolescentes y ancianos.

Estoy enamorado.  Puede ser que sea viejo, pero enamorado como un adolescente… con mis muchos hermanos argentinos.

Y aquí esta noche a solas en un pequeño departamento que una iglesia me presta, Jesús me está colmando de su amor también.  Hace un rato me encontré bañado en lágrimas cantando una hermosa canción que fue escrita por Philip Kerr in 1951. 

“I’m in love, deeply in love with the lover of my soul.

I will sing, praise to my King while the years of eternity roll.

His love is in my heart, never to depart.

His blood has made me whole.

I’m in love with Jesus.  He’s the lover of my soul.”

 Traducción:

 Estoy enamorado, profundamente enamorado del Amante de mi alma.

Cantaré alabanzas a mi Rey mientras corren los años de la eternidad.

Su amor está en mi corazón.  Nunca me dejará.

Su sangre me sanó.

Estoy enamorado de Jesús.  Él es el Amante de mi alma.

Sí.  Por la gracia de Dios me encuentro nuevamente en el país de mi llamado y ahogándome en el amor de los argentinos y en el amor de mi Salvador Jesús.

Ah... por el título arriba pensabas que este viudo viejo había encontrado una mujer... pero pierde cuidado... pues sigo muy enamorado de mi preciosa Frances "la mujer de tu juventud" (Prov 5:18) aunque ella se encuentra ahora con Cristo.  No tengo el menor interés en el romance.  Hice el título así a propósito para engancharte... ja. 

Buenas noches,

Rafael