La iglesia es "Family Christian Center." Los pastores son Ken Moren (en el pulpito) y su esposa Brenda. Es una iglesia vibrante y sobreabundante del amor de Dios. Está situada en la pequeña ciudad de Patterson, rodeada de cultivos agrícolas. Si usted pudiera ver bien los rostros de esta congregación, vería que representan muchas naciones del mundo... un precioso arco iris de colores de piel. Y ¡Qué adoración gloriosa!
Siempre se puede ver una escena semejante
a la que se ve en esta foto... en todos los servicios donde ministro. Dios me ha dado un amor especial por los niños. Estoy plenamente convencido que
el Senor quiere usar hoy a los niños como parte de su poderoso equipo de evangelismo.
Me dicen que esta iglesia ha
estado experimentando un poderoso mover de Dios desde abril de este año... y se
lo nota en el entusiasmo que abunda.
Este fue mi último servicio antes de
regresar a mi amada Argentina el 3 de octubre. Llegaré justo a tiempo
para disfrutar de la Conferencia Nacional de Pastores de La Unión de las Asambleas de Dios.
Posiblemente varios miles de pastores y
líderes laicos estén presentes. Una vez más podré encontrarme con
numerosos amigos de muchos años... algunos que fueron salvos en alguno de los alcances evangelísticos en un parque o una plaza... la mayoría de ellos fueron
entrenados en algunos de nuestros Institutos Bíblicos... y ahora
poderosamente ungidos por Dios, están haciendo una diferencia
positiva en la Argentina y en el mundo!
Después del mensaje muchos de la congregación pasaron al frente, se arrodillaron orando y rindiendo sus vidas de nuevo para servir al Señor.
Los "Enviados" no pueden ser
"Enviados" sin que haya quienes sean "Envíadores". Al final del culto el Pastor Ken Moren invitó a su equipo de liderazgo a
rodearme, ungirme con aceite, e imponerme las manos para "enviarme". No pueden
ver el pastor en la foto porque estaba detrás del pulpito dirigiendo la oración.
Su "Enviarme" no era solamente de palabra, sino también tomaron
acción, pues recogieron una generosa ofrenda de amor.
Esta experiencia se ha repetido varias veces durante estos 2 meses y medio que he estado ministrando por las iglesias
en California en EEUU. ¡Qué privilegio maravilloso de ser un
"Enviado!" Y ¡Qué desafío de ser digno de la confianza y del amor
de mis "Enviadores".
Rafael.