Tuve mi almuerzo en el hogar de un
misionero a la 13:30 después de haber manejado por 4 horas. Luego manejé
otros 30 minutos para asistir a la boda de una deleitosa pareja, Catalina y
Matías, destinados a ser líderes entre los Castilleros del Rey, y que
ciertamente harán grandes cosas para el Señor.
Ellos pensaban tener su boda al aire
libre en el cesped de un pequeño aeropuerto. Habian erigido un arco y una
hermosa carpa blanca con mesas y sillas para la comida después de la boda.
Pero la noche anterior comenzó a llover a cántaros y no ha parado.
Todo se convirtió en barro y una boda al aire libre
era imposible. A último minuto consiguieron alquilar el gimnasio de una
escuela secundaria y había que hacer una mudanza.
Algunos hermanos trataron de armar el arco y por teléfono pidieron ayuda durante la hora de nuestro almuerzo. Lamentablemente lo habían armado mal. Los misioneros Kim y Shari Babcock fueron corriendo a esta pequeña ciudad y yo los seguí. Aparentamente en toda la ciudad no hay calles pavimentadas, y la lluvia arreciaba... bueno, ustedes se imaginan. Ayer, cuando salí tenía un coche limpito, pero ahora, 800 km mas tarde, es un espectáculo de barro. En fin, traté de ayudarles a armar el arco. Más que otra cosa saqué fotos. Estaban en una carrera contra el reloj. La boda estaba anunciada para las 15:17 horas (idea de Catalina, la novia), cuando tuvieron que cambiar de locación también cambiaron la hora para las 15:30. Todos estábamos vestidos con ropa de gala, pero ahora estábamos bañados en sudor.... El misionero Kim Babcock (es el que está con el taladro) estaba empapado hasta los huesos y todavía tratando de armar el arco a las 15:30.
Algunos hermanos trataron de armar el arco y por teléfono pidieron ayuda durante la hora de nuestro almuerzo. Lamentablemente lo habían armado mal. Los misioneros Kim y Shari Babcock fueron corriendo a esta pequeña ciudad y yo los seguí. Aparentamente en toda la ciudad no hay calles pavimentadas, y la lluvia arreciaba... bueno, ustedes se imaginan. Ayer, cuando salí tenía un coche limpito, pero ahora, 800 km mas tarde, es un espectáculo de barro. En fin, traté de ayudarles a armar el arco. Más que otra cosa saqué fotos. Estaban en una carrera contra el reloj. La boda estaba anunciada para las 15:17 horas (idea de Catalina, la novia), cuando tuvieron que cambiar de locación también cambiaron la hora para las 15:30. Todos estábamos vestidos con ropa de gala, pero ahora estábamos bañados en sudor.... El misionero Kim Babcock (es el que está con el taladro) estaba empapado hasta los huesos y todavía tratando de armar el arco a las 15:30.
Se les requería a los novios que
primero completaran la ceremonia civil ante la jueza, con anterioridad a la
ceremonia religiosa. Shari Babcok estaba orando que la jueza llegara
tarde a las 16:00 porque no estábamos listos, y los "jueces no esperan
a nadie" (así va el dicho). La jueza llegó justo a tiempo para subir
al estrado a las 16 horas y ofició muy bien su parte.
El papá de Matías, que es pastor de
una de las iglesias del área presidio la ceremonia con su esposa a su lado.
Fue realmente una boda maravillosa. Me hallé llorando. Creo que es la
primera vez que me encuentro llorando en una boda. Me estoy volviendo llorón con mis años. Me
sorprendí con ver tantos viejos amigos que me saludaron con besos y abrazos.
Son las 9:30pm. Hora de ir a
cenar.
Rafael.