¡Qué semana tan maravillosa he completado! Abundan las
oportunidades. Y mi voz no está super fuerte pero funciona. Tomé el lunes para descansar, lavar mi ropa, etc.
El martes por la noche ministré en una gran iglesia en San
Luis, que fue plantada por mi compañero misionero Dick Nicholson hace muchos
años atrás. Creo que hubo más de 100 niños presentes, con sus padres... una
gran congregación para ministrarles. Pastor Rubén Fernandez juntamente con su esposa, dan igual importancia a todas las edades.
El miércoles manejé los 300 km hasta Mendoza, me ubiqué en
un hotel y luego regresé 60 km para atrás a Rivadavia para un fabuloso
servicio con Pastor Omar Coronel, a quien conozco desde que era niño pequeño.
Ellos habían programado una vigilia (llamada una "Pijamada") para todos los niños pues el día
siguiente, siendo que el 1 de mayo es feriado. Nuevamente hubo un gran grupo
de niños con jóvenes y adultos.
Jueves y viernes Pastor Anselmo Morales me invitó a ministrar en un retiro de hombres en Cacheuta, una pequeña aldea escondida
entre las hermosas montañas de Los Andes.
Les ministré a
unos 80 hombres el jueves por la tarde y luego el viernes por la mañana y por
la tarde. Estaban aprovechando del largo fin de semana para hermosa confraternidad y para buscar a Dios. ¡Y qué notable fue su respuesta al llamado de rendir su todo Cristo.
No me acostumbro a tirar la gente al suelo aunque algunos caen, pero sí que les animo a que voluntariamente se pongan de rodillas, inclinados, humillados, hasta algunos portrados por ante su Maestro y
Señor. El altar parecía una zona de guerra con todos
los hombres rendidos en el suelo delante del Señor. Algunos de estos
hombres me dijeron que nunca volverán a ser los mismos. Solamente Dios
sabe lo qué EL hará con estas vidas dedicadas al Señor.
El sábado por la noche ministré en San Martín de Mendoza a una hermosa congre-gación. Ellos llamaron a
un servicio especial para que yo ministrara. Fue hermosísimo! El pastor es Samuel Coronel... otro hijo del aquel gran siervo de Dios, Ernesto Coronel, que plantó iglesias por toda la zona. Aquí los niños se diviertan con Perfume.
Esta mañana, domingo por la mañana, tuve un servicio
en Guaymallén, donde Alberto y Adriana Marín son pastores, que por dos años han
venido rogándome que regresara. Creo que su congregación se ha doblado en
los últimos dos años.
Esta tarde me sirvieron un almuerzo extraordinario. Pollo delicioso con una ensalada exquisita con verduras y palta y
choclos recién cosechados. Muy pocas veces siento hambre, pero al ver a
la hermana Adriana preparar todas estas cosas exquisitas, se me hizo agua la
boca, y me sentí con hambre, que para mi es algo fuera de lo común. Y me han vuelto a invitar nuevamente para el almuerzo mañana. ¡Que Dios les bendiga!
Al
despedirme de su casa me invitaron al dormitorio para saludar de nuevo sus tres
preciosas hijas.
Esta noche ministré en Villa Nueva, Mendoza con Esteban Morales. La iglesia estaba repleta. Dios se manifestó de una manera
maravillosa. Muchos respondieron al altar de consagración.
Después del servicio pude llevar al Señor a una dama que con
ojos inundados de lágrimas recibió al Señor como su Señor y Salvador. Ella fue invitada al culto por una amiga, y estoy seguro que ella estará en
buenas manos.
Son las 2 de la madrugada.
Pienso que debo acostarme ahora. Basta de charlas. Gracias por
escucharme. Según mi cuenta he predicado ocho veces esta semana pasada,
después de descansar el lunes.
Este lunes no me va a tocar descanso, siendo que dos
pastores me han invitado, insistiendo que los visitara. Por lo tanto los
programé para lunes y martes. El miércoles pienso seguir hacia San Juan,
unos 170 km al norte.
¡¡¡Dios me bendice taantoooo!!!
Rafael