Monday, October 3, 2011

Conferencia UAD 2011 Mendoza

Esta noche tuvimos nuestro primer servicio en la Conferencia de la Unión de las Asambleas de Dios de la Argentina 2011.
El lema de la conferencia este año es "En Ascenso Continuo." El predicador de esta noche era un hermano muy bajito de estatura física. Es el Superintendente Nacional de las Asambleas de Dios en Perú, Rodrigo Espinoza Celadita.
Es pequeño de estatura, pero en mis ojos es un gigante espiritual.
El título de su mensaje fue "Requisitos para estar en Ascenso Continuo", y predicó de Filipenses 2:5-11. Nos dio cuatro puntos para mantenernos en ascenso continuo:
1. Escoger a Cristo como su modelo... o tener el mismo sentir que tenía Cristo… ser como Él.
2. No aferrarse a una posición... o sea su estatus ministerial. Dijo que en pocos meses dejará de ser superintendente, porque las reglas lo limitan a 8 años. La gente le está preguntando: "¿Qué harás ahora?", como si "Ya llegaste a la cima... ¿Qué puedes hacer?" Dice él que volverá a ser un simple siervo.
3. Despojarse… como Cristo se despojó y que se hizo siervo. Habló de los títulos que se aplican a los ministros hoy: Gran Siervo de Dios, Reverendo, Obispo, Profeta, Apóstol, y lo más nuevo, "Patriarca". Dice que no sabe qué nuevo título van a inventar... que el próximo tendrá que ser “arcángel.” Pero Aquel, que merecía los títulos mayores, puso toda su gloria a un lado para hacerse "siervo." Al final la palabra “ministro” quiere decir "siervo".
4. Humillarse a sí mismo. El humilde: a. reconoce sus limitaciones. b. siempre está dispuesto a ayudar. c. no habla de sus propio logros. d. es obediente.
Jesús se humilló hasta la muerte, y muerte de cruz. Concluyó, "No hay ascenso sin muerte". Al final todos nuestros pasos para ascender realmente son pasos en descenso... pues es Dios que nos da el ascenso. Jesús descendió, renunció su posición de ser igual a Dios Padre, se despojó a sí mismo, fue obediente hasta la muerte y muerte de cruz. Por eso Dios lo ha elevado más arriba de todos y le ha dado Nombre que es sobre todo nombre.
Fue un mensaje para pastores y líderes y éramos muchos… me imagino como dos mil. En la conferencia hubo cuatro oradores, cada uno superintendente o presidente de las Asambleas de Dios en su país, Perú, España, Colombia y Argentina. ¡Qué maravilloso fue… sentarnos cuatro días bajo el ministerio de estos dedicados siervos de Dios!

Rafael