Friday, August 17, 2012

Confesión de un Ladrón

(Nota: Pido disculpas.  Este blog fue publicado en inglés el 12 de julio y fue traducido al español con el fin de publicarlo el día siguiente.  Por error se omitió.  Aquí está, tarde pero seguro.  Rafael)

Hoy comenzamos dos días de vacaciones con mi nieta Michelle y su amiga Felicia, hija de los misioneros Eddie y Diana Echevarría.  Juntos hemos ministrado estos últimos 8 días en once eventos y viajado unos 2.000 Kms.  Fuimos hospedados por iglesias en hoteles de lujo y en otras ocasiones dormimos en catres o camas literas.
En todos los servicios Michelle cantó en castellano e inglés y en dos servicios Felicia, de 17 años, fue la predicadora. El viernes por la noche predicó en un estadio cubierto a unos cuantos cientos de personas que los "Jóvenes Castilleros" habían reunido del vecindario en el cual estos jóvenes han comenzado una creciente iglesia. Felicia predicó muy bien y
unas 10 personas pasaron al frente cuando se dio la invitación.  Una adolescente fue tocada poderosament por Dios y estaba llorando.


(Puedes hacer click en las photos para verlas más de cerca.)

En todas las iglesias nos trataron como reyes.  Ayer llegamos a Eldorado justo a tiempo para la merienda en un bonito hotel-restaurante en el que ofrecieron un maravilloso banquete preparado en mi honor.  En los años '60 esta era una iglesia de solo habla alemana, pero en 1969 en una campaña en una carpa hicimos todo en español y muchos se convirtieron. Ahora me obsequiaron un banderín con el texto: "Querido hermano Rafael: Deseamos que seas prosperado en todas las cosas y que tengas salud, así como prospera tu alma."  3 Juan 2
Se dio tiempo para testimonios.  Entre otras personas, una hermana, que es la dueña de este hotel-restaurante, contó la historia como finalmente convenció a su esposo inconverso a asistir a un servicio en la carpa.  Yo predicaba todas las noches y pintaba un cuadro que lo ofrecía a la persona que trajera la mayor cantidad de personas nuevas al servicio.   Ella estaba determinada a ganar un cuadro y trajo 40 personas nuevas.  Su esposo nunca tuvo interés en las cosas de Dios, pero por su insistencia vino para ayudarle a ganar el cuadro.  Ella relató cómo esa noche, cuando yo hice el llamado al altar, yo conté la historia de un ministro que hizo un llamado al altar y que llevó su Biblia a la puerta de salida de la iglesia diciendo: "Si usted sale de esta iglesia esta noche, usted tiene que pasar por encima de esta Biblia, la Palabra de Dios y por encima de esta invitación a recibir Su amor y Su perdón".  (Me acuerdo de esa noche porque solamente conté esa historia una sola vez.  No coloqué mi Biblia en la puerta, solamente hice el relato.)  Esa noche ese hombre le murmuró  a su esposa: "A quién le importa que yo pase por encima de una Biblia.  Ya me voy".  Se encaminó hacia la puerta de la carpa y oyó a sus espaldas una voz audible que le dijo: "Detente". Él se volteó para atrás pero no había nadie.  Eso fue todo para él. Se dió media vuelta y se encaminó hacia el altar y fue maravillosamente salvo esa misma noche.  Hace unos años atrás pasó por los portales de la gloria. 
La iglesia me obsequió un hermoso reloj para que me acordara de Eldorado y la porvincia de Misiones, en donde he ministrado muchas veces en campañas de carpa, incluso la del año 1969.  El pastor Raúl Micheloud me mostró su oficina en la cual tenía colgados dos cuadros que yo había pintado hace muchos años.  Aquí va una foto de uno de ellos.

Hoy, el pastor de otra iglesia en la cual había ministrado el 24 de junio, me habló, para darme un informe sobre un hombre que había pasado hacia el frente cuando hice la invitación.  Me acuerdo que estaba en línea para pasar al frente, cuando lo vi caer hacia atrás con un terrible estruendo.  Nadie había hablado con él, ni le había tocado.  Su caída fue tan recia, que el pastor llamó a la ambulancia y de urgencia lo llevaron al hospital.  Cuando se recuperó en el hospital al lado de un consejero de la iglesia... confesó que era ladrón, y que había ido a la iglesia para hacer un asalto.  Dios lo tiró al suelo con fuerza.  ¡Oigan, no estamos solos en esta lucha!  Nos rodean los ejércitos celestiales.  Yo creo que el ángel Gabriel aún se estaba riendo cuando este sujeto se despertó en el hospital con un hermano introduciéndolo a Jesús. 
Después de una larga semana de actividades, de encontrarnos con muchas personas nuevas... y después de cientos de abrazos y besos en las mejillas, mis dos jovencitas estaban listas para un pequeño descanso.

Fue un gozo inmenso para mí de poder llevarlas a las impresionantes Cataratas del Iguazú.  Felicia ya había estado allí antes y yo he estado allí varias veces antes con Frances y mis hijos.  Es una experiencia exhilarante.  Caminamos para arriba y para abajo por cientos de escalones y por lo que nos parecía kilómetros a través de una hermosa selva tropical... aún cruzando un puente al borde de "La Garganta del Diablo", donde miles de toneladas de agua remolinean y se precipitan en lo que parece un abismo sin fondo, mientras empapan todo y a todos en una circunferencia de muchos metros.  También tomamos la lancha abajo de las cataratas en una excursión de locura a través de los rápidos más salvajes que usted jamás haya visto (aun me cuesta creer que permiten hacer esto), en la misma base de las cataratas, empapándonos por completo.  Toda mi ropa, sin excepción, quedó empapada.  Gritamos y nos reímos como locos hasta que nos dolían las costillas (por lo menos las mías).  Pensamos regresar mañana para otra caminata, esta vez por la parte superior de las cataratas.  No se asusten.  Hay caminos protegidos con varandas. 

Rafael.