Sunday, October 6, 2013

El "Milagro" de Ayer

No me llevó muchos minutos en cuanto llegué a la Argentina el jueves, a encontrarme con mi primer desafío.  Descubrí que en uno de mis viajes, probablemente en el Aeropuerto de San Francisco,  había perdido mi licensia de manejar de California.

Desde el año 2003 mi licensia especial de manejar camiones había expirado, (una licensia especial para manejar mi camión de 58 pies de largo con  su casa rodante de la 5a. rueda), he estado manejando legalmente con mi licensia de California.  Ahora me hallo que no tengo licensia para manejar y que tenía que conseguir una inmediatamente para hacer mis visitas ya confirmadas para predicar.  Tenía la intención de viajar mañana las 450 millas a nuestro semana de  Concilio General de las Asambleas de Dios en las montañas de Córdoba.  Ahora tuve que hacer arreglos para viajar en autobus. 
Sin embargo, después del Concilio necesito tener una licensia válida para comenzar mi ministerio.  Por lo tanto me puse en contacto con la agencia del gobierno que dispensa las licensias, y me informaron que la primera cita disponible era para noviembre, y que una vez que comienza el proceso, lleva una semana para poder tener en mano la licensia.  ¡Eso no es bueno!

Por lo tanto se requería un milagro.  Necesitaba comenzar el proceso ayer, viernes, sin tener cita.  Varios hermanos de la iglesia aquí me rodearon en círculo cerrado y pidieron a Dios que provea el milagro necesario para comenzar el proceso y completarlo a tiempo.  Poco después un hermano pastor que se había enterado de mi dilema, me llamó y me informó de una hermana doctora médica en su iglesia que antes trabajaba para la agencia central que otorga las licensias, que ella estaba dispuesta a ayudarme.  Ella era justo el "milagro" que yo necesitaba.  

Esta hermana conoce a varias personas del personal de esa agencia y en medio de un lugar atestada de gente, consiguió que me atendieran inmediatamente para iniciar el proceso.  Este "Angel Milagroso", se quedó conmigo por dos horas mientras vencía las diferentes "difultades".  Primero vino el examen ocular. Mesorpredió que pude ver sin mis lentes hasta las letras y números más minúsculos de la tabla.  Me chequearon la audición, y otra vez me sorprendí que pude escuchar aún los sonidos más agudos y suaves en ambos oídos.  Mi examen médico consistía de preguntas acerca de mi historia clínica y las medicamentos que tomo.  Finalmente tuve el examen psicológico que consiste en copiar los dibujos de figuras raras en un papel en blanco, seguido de una entrevista con un sicólogo que le hacía preguntas prepraradas especialmente para confundirte (o así parecía... ja).  Luego revisaron mi record previo, (que gracias al Señor estaba limpio), luego tomaron mi fotografía y el jueves que viene tengo que tomar el examen escrito final, (que confío que lo pasaré), y entonces podré salir con mi licensia en mano.

Aunque me perderé la última noche del Concilio para tomar el autobus de regreso a Buenos Aires, pero en fin, me conformo con  eso, ya que podré manejar legalmente otra vez.

Estoy rodeado de "ángeles".  Mi coche está listo para la jornada.  Mi mecánico personal, es decir del coche, ha reconstruido totalmente la transmisión manual, que estaba dañada por la rotura de un sellos en razón de los tremendos baches de las rutas.  Totalmente revisó todo y me limpió el coche por dentro y por fuera.  ¡Se ve nuevecito de paquete y anda como coche nuevo!  ¡Muchas gracias hermano Hugo, y que Dios le recompense por arreglar el "carro de fuego" del profeta!

Vea la foto de Hugo y familia y su admirable historia, haga click en http://ralphhiatt.blogspot.com.ar/2012/02/hugo-hugo-who.html 

Rafael

PS.  Voy a reemplazar mi licensia de California en cuanto vuelva en diciembre.  No hay problemas.